EL EVANGELIO DEL REINO DE LA VOLUNTAD DE DIOS ☀️ Martes 13 mayo, 2025

“YO Y EL PADRE SOMOS UNO”

EVANGELIOS

7/1/202510 min read

EL EVANGELIO DEL REINO DE LA

VOLUNTAD DE DIOS

☀️

“YO Y EL PADRE SOMOS UNO”

Tiempo de Pascua

Semana No. 4,

Martes 13 mayo, 2025

LECTURAS DEL DÍA:

Primera Lectura: Hechos 11,19-26:

Se pusieron a hablar también a los griegos, anunciándoles el Señor Jesús.

Salmo 86:

Alabad al Señor, todas las naciones.

+ SANTO EVANGELIO SEGÚN SAN JUAN 10,22-30:

Se celebraba en Jerusalén la fiesta de la Dedicación del templo. Era invierno, y Jesús se paseaba en el templo por el pórtico de Salomón. Los judíos, rodeándolo, le preguntaban: "¿Hasta cuándo nos vas a tener en suspenso? Si tú eres el Mesías, dínoslo francamente."Jesús les respondió: "Os lo he dicho, y no creéis; las obras que yo hago en nombre de mi Padre, ésas dan testimonio de mí. Pero vosotros no creéis, porque no sois ovejas mías. Mis ovejas escuchan mi voz, y yo las conozco, y ellas me siguen, y yo les doy la vida eterna; no perecerán para siempre, y nadie las arrebatará de mi mano. Mi Padre, que me las ha dado, supera a todos, y nadie puede arrebatarlas de la mano del Padre. Yo y el Padre somos uno."

PALABRA DE DIOS

GLORIA A TI, SEÑOR JESÚS

LECTURA DE LOS EVANGELIOS DEL REINO

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EL POEMA DEL HOMBRE DIOS:

El Evangelio como me ha sido Revelado, 9 diciembre 1946

“Entre tanto muchos judíos que han venido llegando de esta y de aquella parte –pero no con ellos los fariseos, ni escribas, ni sacerdotes- se acercan y rodean a Jesús. Uno de ellos claramente confiesa: “Has obrado cosas grandes en esta mañana. Obras verdaderamente dignas de un profeta y de un gran profeta. Los espíritus de los abismos han dicho de Ti cosas grandes. Pero no pueden aceptarse sus palabras, si la tuya no las confirma. Estamos temblando de miedo por esas palabras. Pero también tenemos miedo de engaño porque se sabe que Belcebú es un espíritu mentiroso. Dinos, pues, quién eres. Dinos con tu propia boca que respira verdad y rectitud”. “¿No os lo he dicho tantas veces? Hace ya casi tres años que os lo vengo diciendo, y antes de Mí, os lo dijo Juan en el Jordán y la Voz de Dios que se oyó de los cielos”. “Tienes razón. Pero nosotros no estuvimos esas veces. Nosotros… Tú que eres un hombre recto, debes comprender nuestras ansias. Queremos creer en Ti como en el Mesías. Pero ha sucedido muchas veces que el pueblo de Dios ha sido engañado por falsos mesías. Consuela nuestro corazón que espera oír una palabra de seguridad y te adoraremos”. Jesús los mira severamente. Sus ojos parecen perforar sus cuerpos y dejar al descubierto sus corazones. Luego dice: “Realmente muchas veces los hombres saben decir mentiras mejor que Satanás. No. Vosotros no me adoraréis. Jamás. Sea lo que os dijere. Y si lo llegaseis a hacer, ¿a quién adoraríais?” “¿A quién? ¡A nuestro Mesías!” “¿Llegaríais a hacerlo? ¿Quién es para vosotros el Mesías? Responded, para que sepa lo que valéis”. “¿El Mesías? El Mesías es el que por órdenes de Dios juntará al Israel disperso y lo hará un pueblo victorioso, bajo cuyo cetro estará el mundo. ¿No sabes lo que es el Mesías?” “Lo sé, como lo sabéis. Para vosotros, pues, es un hombre que superando a David y Salomón y a Judas Macabeo, hará de Israel la nación reina del mundo”. “Así es. Dios lo ha prometido. El Mesías nos vengará, nos hará gloriosos, nos devolverá nuestros derechos. El Mesías prometido”. “Escrito está: ‘No adorarás a otro que no sea el Señor Dios tuyo. ¿Cómo podréis adorarme, si en Mí sólo veis al Hombre-Mesías?” “¿Y qué otra cosa podemos ver en Ti?” “¿Qué? ¿Y con estos sentimientos habéis venido a preguntarme? ¡Raza de víboras engañosas y venenosas. Sois hasta sacrílegos. Si en Mí no podéis ver otra cosa que el Mesías humano y me adoráis, sois unos idólatras. Sólo a Dios se debe adoración. En verdad os digo que el que os está hablando es más que el Mesías que os figuráis con una misión, con palacios y poderes, que sólo vosotros, faltos de espíritu y sabiduría, os imagináis. El Mesías no ha venido a dar a su pueblo un reino, como creéis. No ha venido a ejercer venganza sobre otros poderosos. Su Reino no es de este mundo. Su poder sobrepuja cualquier otro poder del mundo, que siempre es limitado”. “Nos mortificas, Maestro. Si eres Maestro y nosotros somos ignorantes, ¿por qué no quieres instruirnos?” “Hace tres años que lo estoy haciendo, y siempre estáis en las tinieblas, rechazando la Luz”. “Es verdad. Tal vez lo sea. Pero lo que fue en el pasado, no quiere decir que suceda en lo porvenir. ¿Y qué? Tú que tienes piedad de los publicanos y de las prostitutas, que absuelves a los pecadores, ¿no vas a tener piedad de nosotros sólo porque somos de dura cerviz y nos esforzamos en comprender lo que eres? “No es que os esforcéis. Es que no queréis comprender. No sería culpa alguna que fuerais unos idiotas. Dios tiene muchas luces que podrían alumbrar aun la inteligencia más cerrada, pero llena de buena voluntad. Esto es lo que os falta. Más bien, tenéis una, sí, que es opuesta. Por eso no comprendéis Quién soy”. “Será como dices. Estás viendo cuán humildes somos. Te pedimos en el nombre de Dios. Responde a nuestras preguntas. No tengas otras sospechas de nosotros. ¿Hasta nuestro corazón va a quedar inseguro? Si eres el Mesías dínoslo claramente”. “Os lo he dicho. En las casas, plazas, caminos, poblaciones, montes, ríos, en las playas del mar, en las fronteras de los desiertos, en el Templo, en las sinagogas, en los mercados os lo he dicho, y vosotros no creéis. No hay lugar de Israel que no haya oído mi voz. Hasta los lugares que abusivamente llevan el nombre de Israel desde hace siglos, pero separados del Templo, hasta los lugares que han dado nombre a esta tierra nuestra, que de dominadores se convirtieron en subyugados, que jamás se libraron de sus errores para venir a la Verdad, hasta la Siro-Fenicia, que los rabinos esquivan como tierra de pecado, han oído mi voz y conocido lo que soy. Os lo he dicho, y no creéis en mis palabras. He realizado cosas a las que no habéis prestado un corazón generoso. Si lo hubierais hecho con espíritu sincero, habríais llegado a creer en Mí. Aquellos que tienen buena voluntad, que me siguen, porque me reconocen como a su Pastor, han creído a mis palabras y al testimonio que dan mis obras. ¿Creéis acaso que lo que hago, no tenga por objeto vuestra utilidad? ¿Y utilidad para todas las criaturas? Desengañaos. No penséis que la utilidad depende de la salvación de uno solo, que mi poder consiguió, o que haya sido librado de la obsesión o del pecado. Esto es una utilidad circunscrita a un individuo. Poca cosa respecto al poder que viene dado por la fuente sobrenatural, más que sobrenatural: Divina, que le da salida para que sea la única utilidad. Hay una utilidad en las cosas que hago. La utilidad de quitar toda duda a los que dudan, de convencer a los contrarios, además de robustecer cada vez más la fe de los que creen. Por razón de esta utilidad colectiva, en favor de todos los hombres presentes y futuros, porque mis obras darán testimonio de Mí a los que vendrán después y los convencerán en lo que se refiere a Mí, mi Padre me dio poder de hacer lo que hago. En las obras de Dios nada se hace sin un buen fin. Recordadlo siempre. Meditad en esta verdad”.

¡FIAT!

+ EL EVANGELIO DE NUESTRA MADRE CELESTIAL:

LA REINA DEL CIELO EN EL REINO DE LA DIVINA VOLUNTAD

Visita Celestial Día 18:

“Ahora escucha hija querida hasta dónde se puede llegar cuando el Divino Querer toma la vida obrante en la criatura y la voluntad humana lo deja hacer sin impedirle el paso. Este Fiat, que en naturaleza posee la virtud generativa, genera todos los bienes en la criatura, la hace fecunda, dándole la maternidad sobre todos, sobre todos los bienes, y sobre Aquél que la ha creado. Maternidad dice y significa verdadero amor, amor heroico, amor que se contenta con morir para dar vida a quien ha generado; si no hay esto, la palabra maternidad es estéril, está vacía y se reduce a palabras, pero en los hechos no existe. Por eso hija mía, si quieres la generación de todos los bienes haz que el Fiat tome en ti la vida obrante, el cual te dará la maternidad y amarás todo con amor de madre, y Yo, tu Mamá, te enseñaré el modo cómo fecundar en ti esta Maternidad toda Santa y Divina.

¡FIAT!

+ EL EVANGELIO DEL REINO DE LA VOLUNTAD DIVINA

Vol. 6-27(1-8) Marzo 16, 1904:

(1) Esta mañana encontrándome fuera de mí misma, me he encontrado sobre una persona que tenía el aspecto como si estuviera vestida como una oveja, y yo era llevada sobre sus espaldas, pero iba a paso lento; adelante iba una especie de máquina más veloz, y yo en mi interior he dicho: “Éste va lento, quisiera ir dentro de aquella máquina que camina más veloz”. No sé el por qué, pero apenas pensado esto me he encontrado dentro de ella en compañía de los que iban en ella, y ellos me han dicho: “¿Qué has hecho? ¿Cómo has dejado al pastor? Y qué pastor, pues estando su vida en los campos son suyas todas las hierbas medicinales, nocivas y salutíferas, y estando con Él se puede estar siempre con buena salud, y si lo ves vestido de oveja es para volverse similar a las ovejas, haciendo que ellas se le acerquen sin ningún temor, y si bien va a paso lento, pero es más seguro”. Yo al oír esto he dicho en mi interior: “Ya que es así, quisiera decirle alguna cosa sobre mi enfermedad”. Mientras esto pensaba me lo he encontrado cerca de mí, y yo toda contenta me he acercado a su oído y le he dicho: “Pastor bueno, si eres tan experto dame algún remedio para mis males, pues yo me encuentro en este estado de sufrimientos”. Y queriendo decir más, me ha callado al decirme:

(2) “La verdadera resignación, no fantástica, no pone a escrutinio las cosas, sino que adora en silencio las divinas disposiciones”.

(3) Y mientras esto decía, parecía que se rompía la piel de lana y veía el rostro de Nuestro Señor, y su cabeza coronada de espinas. Yo al oír que me decía esto, no sabía más qué decir, me quedaba en silencio contenta de estar junto con Él, y Él ha continuado:

(4) “Tú has olvidado decirle al confesor otra cosa sobre la cruz”.

(5) Y yo: “Adorable Señor mío, yo no recuerdo, repítemela y la diré”.

(6) Y Él: “Hija mía, entre tantos títulos que tiene la cruz, tiene el título de un día festivo, porque cuando se recibe un don, ¿qué cosa sucede? Se hace fiesta, se goza, se está más alegre; ahora, la cruz siendo el don más precioso, más noble y hecho por la persona más grande y única que existe, resulta más agradable y lleva más fiesta, más gozo que todos los otros dones. Entonces, tú misma puedes decir qué otros títulos se puede dar a la cruz”.

(7) Y yo: “Como Tú dices, se puede decir que la cruz es festiva, jubilosa, gozosa, anhelante”.

(8) Y Él: “Bien, has dicho bien, pero el alma llega a experimentar estos efectos de la cruz cuando está perfectamente resignada a mi Voluntad, y se ha dado toda sí misma a Mí, sin retener nada para sí, y Yo para no dejarme vencer en amor por la criatura, le doy todo Yo mismo, y en el donarme a Mí mismo dono también mi cruz, y el alma reconociéndola como don mío hace fiesta y goza”.

¡FIAT!

REPARACIÓN A JESÚS

LAS 24 HORAS DE LA PASIÓN DE NUESTRO SEÑOR JESUCRISTO

VIGÉSIMA PRIMERA HORA, 1 pm

Segunda Hora de agonía en la Cruz.

Crucificado Amor mío, mientras Contigo rezo, la fuerza raptora de tu Amor y de tus Penas mantiene fija mi mirada en Ti, pero el corazón se me rompe al verte Sufrir tanto, y Tú Sufres atrozmente de Amor y de Dolor, las Llamas que queman tu Corazón se elevan tan alto, que están en acto de incinerarte; tu Amor reprimido es más fuerte que la misma muerte, por eso, Queriéndolo desahogar pones tu Mirada en el ladrón que está a tu derecha, y Queriéndoselo robar al infierno le tocas el corazón, y ese ladrón se siente todo cambiado, Te reconoce, Te confiesa por Dios, y todo contrito dice: «Señor, acuérdate de mí cuando estés en tu Reino». (Lc 23, 42) Y Tú no vacilas en responderle: «Hoy estarás Conmigo en el Paraíso». Y de él haces el primer triunfo de tu Amor. Pero en tu Amor veo que no es solamente al ladrón a quien le robas el corazón, sino a tantos moribundos. ¡Ah! Tú pones a su disposición tu Sangre, tu Amor, tus Méritos y usas todos los artificios y estratagemas Divinos para tocarles el corazón y robarlos todos para Ti. Pero aquí también tu Amor se ve impedido. ¡Cuántos rechazos, cuántas desconfianzas y también cuántas desesperaciones! Y es tanto el Dolor, que de nuevo te Reduces al silencio. Quiero, oh mi Jesús, reparar por aquellos que desesperan de la Divina Misericordia en el punto de la muerte. Dulce Amor mío, inspira a todos confianza y seguridad ilimitada en Ti solo, especialmente a aquellos que se encuentran en las estrechuras de la agonía, y en virtud de esta Palabra Tuya concédeles Luz, fuerza y ayuda para poder volar de esta tierra al Cielo. En tu Santísimo Cuerpo, en tu Sangre, en tus Llagas, contienes todas, todas las almas, oh Jesús. Por los méritos de tu Preciosísima Sangre no permitas que ni siquiera una sola alma se pierda, tu Sangre grite aún a todas, junto con tu Voz: «Hoy estarás Conmigo en el Paraíso». (Lc 23, 43).

GLORIA PATRI

ET FILIO ET SPIRITUI SANCTO

SICUT ERAT IN PRINCIPIO ET NUNC ET SEMPER

ET IN SAECULA SAECULORUM

AMEN.